El sabor de la despedida

La ciudad aprendió a vivir con el adiós de las singladuras y la incertidumbre de los nuevos mares. El primer presagio llegó cuando enmudecieron las sirenas del astillero. Poco a …

Desde la otra orilla

Un barco la trajo al puerto cuando yo apenas empezaba a ser un hombre y ella, que era casi tan joven como yo, llevaba en la sangre la sabiduría de …